La Gran Isla de Plástico del Pacífico Norte

Vete a dar un paseo por cualquier playa y verás un gran número de bolsas de plástico, botellas, bidones, mecheros o trozos de espuma en la arena o en las rocas. Estos residuos, tirados en tierra o en el mar, son arrastrados por el viento y la marea mar adentro. Los plásticos no se degradan como los materiales naturales, y bajo la influencia del sol, de la acción de las olas y de la abrasión mecánica, se descomponen lentamente en trozos más pequeños.

Estos pequeños pedazos de plástico se acumulan en áreas marítimas donde los vientos y las corrientes son flojos. El giro subtropical del Pacífico Norte cubre una extensa zona del Pacífico donde el agua circula en el sentido de las agujas del reloj describiendo una espiral lenta. Los vientos y las corrientes tienden a dirigir a la materia que flota en el agua hacia la zona central de baja energía del remolino. Existen pocas islas donde pueda recogerse el material flotante, por lo que éste permanece en el remolino en unas asombrosas cantidades estimadas en seis kilos de mierda por cada kilo de plancton natural, extendiéndose en un área equivalente a dos veces el tamaño de EEUU. Es decir, una isla de mierda del tamaño de un continente girando lentamente como un reloj. El remolino del Pacífico Norte es uno de los cinco remolinos oceánicos existentes, por lo que este problema está presente también en otros mares.

Este hecho no sería un gran problema si el plástico no tuviera efectos tan nocivos para la fauna marina. Se estima que más de un millón de aves marinas y unos cien mil mamíferos marinos y tortugas mueren cada año por ingestión de plásticos o estrangulados por ellos. Existe un problema añadido. Los plásticos pueden actuar como una especie de “esponja química” al concentrar muchos de los contaminantes más peligrosos encontrados en los océanos. Así, cualquier animal que ingiera estos trozos de basura plástica está también ingiriendo con ellos contaminantes altamente tóxicos. Claro que no todos los plásticos flotan. De hecho alrededor del 70% de los plásticos desechados se hunden en el mar. Estos plásticos pueden cubrir el fondo marino y matar animales y plantas que se encuentran por allí.

El problema de la basura plástica debe ser resuelto urgentemente. A nivel personal podemos contribuir a su solución evitando la compra de productos con excesivos plásticos y preocupándonos de que nuestra basura sea gestionada de forma responsable. En otras palabras, que cuando vayais a Carrefour a compraros sólo un cepillo de dientes, no dejéis que os lo metan en una bolsa de plástico, os lo metéis en el bolsillo-mochila-bolso que llevéis en ese momento y santas pascuas. Otro ejemplo: no compreis sobaos Martínez. Esta gente mete cada sobao en una bolsita de plástico individual, un desperdicio. Hay mil ejemplos como estos dos.

Aquí os dejo un video en el que unos científicos muestran agua de mar llena de trozos de plástico.

Fuente: Vivajosua